martes, 27 de octubre de 2020

Consecuencias de no superar las Etapas del Desarrollo Psicosexual

 

    Cuando las etapas no se pueden superar surgen diversos mecanismos de defensa como la regresión y fijación:






Regresión

 

     Según Sigmund Freud, considerado el fundador del psicoanálisis, la regresión es un mecanismo de defensa que consiste en el retroceso del yo a un estadio anterior del desarrollo. Este proceso se daría en respuesta a pensamientos o impulsos inaceptables que la persona no puede afrontar de modo adaptativo, y podría ser transitorio o crónico.

    Freud afirmó que, a lo largo del desarrollo psicosexual, las personas jóvenes corren el riesgo de quedar psicológicamente ancladas en uno de los estadios, sin lograr avanzar de forma completa a través de los posteriores. Esto se conoce como “fijación”, y cuanto más intensa sea mayor será también el riesgo de reaccionar al estrés psicosocial con una regresión.

    En los planteamientos psicoanalíticos originales la regresión en la adultez se presenta como íntimamente asociada a la neurosis. Posteriormente se ha propuesto que este cambio no siempre es patológico o negativo, sino que en ocasiones las regresiones transitorias podrían ser beneficiosas para la superación del malestar o el fomento de la creatividad.

    Una característica muy destacable de este fenómeno es la aparición de comportamientos y actitudes típicamente infantiles. Sin embargo, en función de los estadios psicosexuales en que se produjera una fijación aparecerán unas conductas regresivas u otras; por ejemplo, Freud consideraba que morderse las uñas y fumar son signos de fijación en la fase oral.

    La regresión oral también se manifestaría en conductas relacionadas con la ingesta y con el habla. Por contra, la fijación en la etapa anal podría llevar a una tendencia compulsiva al orden o al desorden, a la acumulación y a la tacañería extrema, mientras que la histeria de conversión sería característica de la regresión al periodo fálico.

      Aunque puede presentarse en la edad adulta, la regresión es más común en la infancia. Serían ejemplos de regresión que una niña empiece a orinarse en la cama tras el nacimiento de su hermano pequeño o que un preadolescente llore cada vez que sus compañeros de clase se burlan de él.

 

Fijación

Por fijación se entiende la detención de una cantidad de libido en ciertas zonas erógenas, fases de desarrollo, objetos, condiciones o formas de satisfacción experimentadas en el pasado, que no permiten a la parte fijada de la pulsión el posterior desarrollo. Las condiciones de la fijación son, para Freud, de dos tipos: hechos históricos específicos, como un trauma o la influencia de la constelación familiar, o bien la incapacidad del sujeto de abandonar una fase libidinal en la que encontró satisfacción, “no confiando en la posibilidad de encontrar un sustituto satisfactorio en una posición libidinal nueva”.

Tipos de fijación, Freud distingue:

 1] la fijación de una pulsión parcial que en el desarrollo de la libido no se subordina a la organización genital de la sexualidad, sino que continúa buscando satisfacciones independientes, como en el caso de las perversiones, en las cuales la pulsión no busca su satisfacción en el coito;

2] la fijación a una fase de la sexualidad pregenital, por lo que una parte de la libido no logra desarrollarse y queda fijada en la fase oral, anal  o fálica.

3] la fijación al objeto, por lo que por ejemplo una niña puede quedar fijada a la madre, en cuanto objeto preedípico, sin lograr establecer con el padre una relación edípica positiva.

4] la fijación a una experiencia traumática que después se manifiesta en las neurosis traumáticas ( trauma).

 

En la Etapa Fálica se produce el complejo de Edipo y Electra que al no ser superadas correctamente le produce problemas cuando es adulto.



Existen dos tipos de Complejo de Edipo; el complejo positivo sería el clásico en el que el varón se siente atraído por su madre y repelido por su padre y el complejo negativo en el que sucede al contrario.

A pesar de que hay fuertes críticas con respecto a las teorías freudianas, lo cierto es que las consecuencias del complejo de Edipo persistente pueden generar graves consecuencias en el desarrollo emocional del futuro adulto. La mala resolución conlleva algunas consecuencias:

·         No relaciona sexo y amor: La ternura le es ajena al sexo.

·         Promiscuidad: A menudo, las personas que no han resuelto su complejo son incapaces de mantener una relación por temor a la intimidad.

·         Idealización: El amor se idealiza llegando a enamorarse platónicamente para no afrontar una verdadera relación de pareja.

    Un complejo de Electra no resuelto puede llevar a la futura mujer adulta a la incapacidad de enamorarse y de tener intimidad con otra persona.

    Lo más probable es que un complejo de Electra no resuelto lleve a la adulta a buscar relaciones con personas que se ajusten a la personalidad del padre. El gran problema aparece cuando estos rasgos de personalidad no se ajustan a las necesidades afectivas y emocionales de la mujer ya que, por una parte, tiene idealizada la figura del padre y, por otra, es una persona adulta con un carácter y personalidad propios que no tienen por qué ser compatibles con los rasgos de su progenitor.

    Esto le puede llevar a “buscar a su padre” en cada relación que tenga, independientemente de si esto es positivo para ella o no.

 


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Consecuencias de no superar las Etapas del Desarrollo Psicosexual

      Cuando las etapas no se pueden superar surgen diversos mecanismos de defensa como la regresión y fijación: Regresión         Seg...